‘El cartel de los sapos’, más que de la calidad

Como no nos gusta atarnos a series de TV que se continúan, no vimos nunca ni un solo episodio de la serie “El Cartel de los sapos”; sí hemos escuchado muchos elogios sobre ella, en especial sobre el desarrollo del carácter y la sicología de sus personajes, que son los mismos de la película que ahora hemos visto.

Y creo comprender la razón por la cual no nos gustó dicho film.

Es que, por un lado, no existe en la obra del director Carlos Moreno un desarrollo ni un análisis de dichos personajes, porque eso de poner a Martín enamorado de la hermosa Sofía desde que era un niño es algo episódico e ilustrativo, pero no profundiza en su forma de ser.Y si eso sucede con Martín, del resto ni siquiera hay que hacer mención.

En realidad, todo el relato se limita al enamoramiento del personaje central y a sus tratos con la droga, salpicado de un par de tiroteos un tanto acomodaticios (en ciudad México, que llegue un patrullero y minutos luego no aparezca ni un solo policía es cuestionable tratándose de un tiroteo intenso). 

Que ese Martín anduviera suelto luego de ser detenido en USA por la DEA, por más trato que hubiera, es también más que cuestionable. 

Que desembarquen en una lancha a motor en Miami con varios bultos de droga resultó más fácil que salir de un vuelo comercial con un bulto de mano.

Desde ese punto de vista, esos son fallos achacables al guión. Pero ese apretujamiento del relato es resultado del deseo de contar toda la historia que se contó en la serie de TV, o sea, varias horas, en una hora y cuarenta minutos, lo cual hace que el relato resulta a ratos confuso y entrecortado, que de la impresión de haber sido tijereteado (casi lo mismo que en “A Dangerous Method”), y eso es responsabilidad también del guión, pero al igual de la dirección. 

Las actuaciones son buenas, no sobresalientes, la fotografía es de calidad, la musicalización adecuada, o sea, un conjunto de cierta calidad, por lo cual nos sorprendió saber que Colombia la había seleccionado como su candidata al Oscar al mejor film extranjero. En esa nación se han hecho muchas cintas mucho mejores que la presente.

Decididamente, nos quedamos esperando lo que habíamos escuchado sobre “la gran calidad” de la película de Carlos Moreno.